Ubicada al final de la calle Zaragoza, nos encontramos con una de las plazas más históricas de la ciudad y catalogada como Bien de Interés Cultural junto con el Parque Ribalta y la Plaza de la Independencia.
Su construcción data de finales del siglo XVIII, cuando se derrumbó la muralla que rodeaba la ciudad para permitir su expansión. A su alrededor se construyeron varios edificios de no más de cuatro plantas. Algunos de estos edificios siguen aún en pie y reformados. Estas edificaciones destacan por su variedad arquitectónica. Así pues, encontramos edificios con elementos del racionalismo, purismo o del art déco, un estilo que destaca también en edificios de grandes ciudades como Nueva York o París.
Junto a la plaza se
construyó en 1932 uno de los edificios más bonitos de la ciudad: el edificio de
correos, del que hablaremos más detalladamente en una próxima publicación.
Actualmente, en la zona central de la plaza encontramos una escultura de acero pintado de Miquel Navarro y realizada en 1989 que representa a la diosa griega de la sabiduría y las artes, Minerva.
El nombre de esta plaza proviene de la ciudad de Tetuán, Marruecos, antiguo protectorado español en el siglo XX. Es por eso que Tetuán está presente en calles, parques, edificios o barrios de toda España.